¡En español!


DIETAS: ¿SON BUENAS PARA LOS ADOLESCENTES?

Por el Doctor Pedro Barreda

Pediatra   

                No solamente no son recomendables, sino hasta pueden resultar altamente perjudiciales. Básicamente, porque el adolescente está creciendo. Si su tratamiento no es vigilado por un médico y no se produce una relación equilibrada entre la ingesta y el gasto calórico, los resultados nunca van a ser satisfactorios, al menos a largo plazo.

                El secreto está en un programa preventivo a nivel nacional de la obesidad: El adolescente necesita aprender a comprar lo que se va a comer, y saber la composición de cada producto que compra; también saber la diferencia entre la publicidad verdadera y la falsa.  

                El adolescente necesita ver un buen modelo por parte de sus padres.  También necesita aprender mucho en la escuela; debe aprender los riesgos de la obesidad y la importancia de una dieta balanceada y alimentos nutrituvos.

          

               

¿Son efectivos las dietas estrictas para los adolescentes?

                La estadística es desilusionante, porque los programas no tienen buenos resultados en el largo plazo. Como los hábitos de alimentación ya han sido formados, las posibilidades de mantener el peso que se rebaja en un corto plazo, han disminuido notoriamente. La restricción calórica o dieta tiene un éxito muy cuestionable: moderado a corto plazo, pero bastante malo en tiempo prolongado. El 80 por ciento de los adolescentes que se somete a tratamiento reincide en la obesidad.

¿Representan algún tipo de riesgo las dietas?

                Varios. Aparición de un síndrome depresivo durante la etapa del tratamiento (de allí que se hace necesaria la presencia de un médico); desencadenamiento de trastorno del apetito -bulimia compulsivo- en alguna personalidad predispuesta.

                Una restricción calórica detiene el crecimiento. Incluso una reducción moderada puede producir un aumento de la utilización de la energía a partir de las proteínas (neoglucogenesis). Se empiezan a catabolizar las proteínas y con ello disminuye la masa magra muscular.

¿Es posible volver a comer una dieta normal y subir de peso?

                Cuando el adolescente empieza una dieta estricta, hay cambios en el metabolismo basal. El cuerpo gasta menos energía para mantener la vitalidad. Pero si la persona vuelve a sus hábitos antiguos, y come una dieta normal (la dieta que tenía antes de la dieta) subirá de peso y ¡mucho más que antes! porque el metabolismo es diferente ahora. Hay que creerles a aquellas personas que dicen terminar comiendo como pajaritos, pero subiendo de peso.

Pero, ¿cómo se puede disminuir el consumo de calorías?  

                No hay alimentos prohibidos, pero se deben tener las cuatro comidas diarias bien balanceadas, con porciones de tamaño normal. Hablamos de alimentos, no de dulces, chocolates, golosinas. Los procesos no deben apurarse con ayunos, dietas drásticas ni píldoras dietéticas, porque sus resultados no están comprobados y hasta pueden ser peligrosas.

¿Qué se debe comer, entonces?

                Líquidos, agua o bebidas dietéticas. Leche en todo niño, pero después de los dos años puede ser libre de grasas. Las comidas deben tener pocos alimentos grasosos. Una porción de grasa tiene el doble de calorías que una de azúcar o proteínas. Al pollo, hay que quitarle la grasa. Prefiera alimentos horneados, a la parrilla, hervidos o cocidos al vapor antes que fritos. Frutas, hortalizas, cereales. Postres pequeños y sin cremas.

¿Cómo se puede mantener un peso normal?

                Formar hábitos que perduren toda la vida. No omita comidas y siempre tome agua antes de comer. No coma porciones extras y no pique entre comidas.  Sólo coma en el comedor o la cocina, nunca cuando mira la televisión, estudia,  va de compras. No forme el hábito de comer solo.

  This information comes from: http://www.pediatraldia.cl/pb/Dietaadolescente.htm